Yo, desubicado en esta vida.

Los nombres para conmigo siempre han tenido un carácter cambiante (dentro de lo socialmente aceptable). Cuando era pequeño mi hermano me llamaba, como imagino, muchos hermanos mayores a los pequeños, me llamaba subnormal. Bueno, ahora que recuerdo, aún hoy, a veces, también lo utiliza. Mi padre durante una época se empeñó en llamarme Antonio, aunque ciertamente, debió ver que no le hacía mucho caso y poco a poco empezó a cambiar a Javi. Hay que decir, que el día que mi padre quería reprenderme por alguna "malifeta", entonces me llamaba por mi nombre completo Antonio Javier, y yo con eso, ya sabía que no íbamos bien. Mi madre, siempre me ha llamado Javi. En el colegio me llamaban también así (entiéndase EGB). Hasta aquí, lo normal, a partir de aquí empezaron los cambios de nombre. En primero de BUP, quisieron llamarme Junior, pues mi hermano es toda una celebridad en mi ciudad (a parte que le tengo aprecio, ciertamente lo conoce media ciudad, para bien o para mal). Después por motivos que ahora no vienen al caso, tuve que cambiar de instituto y allí rápidamente buscaron un nombre para mi; era bastante habitual tener mote, pues al estar internados, la gente coge más confianza los unos con los otros; y ya sea por cariño, o por joder, casi siempre acaba todo el mundo teniendo un mote. Había algunos bastante interesantes como La Moto, Chita, Monchito, Cuervo... bueno un montón de ellos. Pues a mí me llegaron a llamar Chicho y Little Wall, pero ninguno de estos dos nombres llegó a cuajar. Así que durante esa época respondía al nombre de Xavi o Xavier. Más adelante en la universidad, me empezaron a llamar Toy y ciertamente, hoy en día, todavía queda gente que me llama así, y no son pocos! Cuando estuve en alemania, un amigo empezó a llamarme El Comandante (era muy gracioso escuchar a los franceses decir algo así como Le commandant), luego más adelante los del sur de la península, al cansarse de decir un nombre tan largo, lo acortaron por Capi. Hoy en día, en el trabajo, me llaman Xavi.

Sólo un par de pequeños comentarios sobre mi nombre. Yo tengo un hermano mayor (sí, ese que me llamaba subnormal) que me puso el nombre que le salió de los huevos. Varias veces ya me ha dicho, que estuvo dudando entre Xavi o David; pues que queréis que os diga, yo prefiero el que tengo. En estas líneas he omitido los insultos diarios con los que también se refieren a mi, pero esos, no tienen nada de especial, pues todos los compartimos, porque a veces a ti, también te llaman putas, yonki, borracho, marica, cabrón, cariño...